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Wellington

Es la capital de Nueva Zelanda desde 1865 y donde está ubicado el gobierno. Una de las leyendas maorís haría referencia a que Wellington es la cabeza del pez que forma la Isla Norte. Nada más llegar quedarás asombrado sobre su planificación urbanística en el que se ha aprovechado y construido la ciudad sobre la cima de las montañas.

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Wellington es la capital de Nueva Zelanda aunque no es la ciudad con mayor población. Por encima de ella, se encuentran Auckland y Christchurch. Está situada en el extremo sur de la Isla Norte justo en el estrecho de Cook que separa la isla Norte de la Isla Sur.

Sustituyo como capital a Auckland en 1865 y se piensa que algunas razones por las que se convirtió en capital fueron por su situación céntrica, su importante puerto y para evitar la independencia de tierras cercanas que habían encontrado oro.

Aunque su actual nombre proviene de uno de los venceros de la batalla de Waterloo, el duque de Wellington, ha sido bautizada con varios nombres maorís que traducidos significan: Puerto de Tara, haciendo referencia a su puerto o la Cabeza del Pez de Mâui que alude a la leyenda de que la Isla Norte es un pez que fue atrapado por Mâui y la zona de Wellington es la cabeza del pez. Actualmente, los lugareños la conocen como Wellington la Ventosa, por la cantidad de aire que sopla fuerte en la capital.

En el centro de la ciudad se encuentra su centro financiero, uno de los más importantes del país. Está cerca de su puerto natural que posee tres islas, una de ellas es conocida por ser una zona protegida y haber sido un centro de detención durante las dos guerras mundiales. Debido a su gran actividad sísmica, el puerto está rodeado de bonitas colinas que han sido formadas.

Destaca por ser la meca de la cultura del país con números museos o teatros y es sede de la ópera, la orquesta sinfónica y de la industria cinematográfica de Nueva Zelanda. Además, y no menos importante para sus habitantes, destaca por poseer 500 kilómetros cuadrados de parques y zonas naturales protegidas.

Es una ciudad muy accesible ya que la proporción de edificación en los alrededores es pequeña y todo se encuentra relativamente cercano. Uno de sus medios de transporte y sello característico de la ciudad, es su funicular que comunica la ciudad. Además se ha creado una cultura y estilo de vida en cafeterías, restaurantes y bares calculando que posee más por habitante que Nueva York.

Wellington es la capital cultural de Nueva Zelanda. Por ello no olvide de visitar sus museos, galerías de arte o disfrutar de una obra de teatro. Es visita obligatoria el museo Te Papa donde aprenderá sobre la historia neozelandesa desde la llegada de los maorís hasta la actualidad. Por otra parte, explore el Museo de la Ciudad y del Mar donde descubrirá el desarrollo de la ciudad. No menos importante es la música y el cine en esta ciudad. Aproveche para ir a la orquesta de Wellington o al museo Weta Cave dedicada al cine de grandes producciones.

Si quiere disfrutar de unas vistas panorámicas de la ciudad, el mejor lugar para hacerlo es el Monte Victoria. Aunque no hay que descartar subir al icónico funicular y dirigirse a la cima donde encontrará de un mirador con unas fantásticas vistas. Gracias a este transporte, podrá visitar fácilmente el Museo del Funicular, conocer más sobre el universo en el observatorio Space Place y volver a la ciudad dando un paseo por el jardín botánico.

También puede coger un autobús, para dirigirse al área protegida de Zealandia para poder conocer a aves, algunas de ellas en peligro de extinción, y su flora autóctona.

En la bahía, su muelle y el paseo marítimo es donde se desarrolla prácticamente toda la actividad. No olvide tomar el sol a la orillas del mar, tomar una cerveza o darse un paseo en el paseo marítimo, practicar deportes acuáticos como el kayak en su bahía.

Una de las pasiones deportivas de los habitante de Wellimgton es el rugby y que mejor manera de conocer más sobre este deporte que comprar unas entradas para ver un partido en el estadio Westpac.

Otra manera de conocer el estilo de vida de esta ciudad es dedicando tiempo a sus numerosos restaurantes y cafeterías. Y si su intención es disfrutar de su vida nocturna, Courtenay Place es el mejor lugar. Tampoco olvide visitar la bohemia calle de Cuba en el que sus tiendas y calles está llenas de vida.

Podrá coger el ferry y acercarse a una de las islas que están en la bahía conocida como la isla Matiu/ Somes que es una isla protegida donde podrá acercarse a su mirador para tener unas bonitas vistas de la bahía